.png "Blog de calidad del aire de air-Q sobre los efectos de la mala calidad del aire en la salud, el rendimiento y la productividad.")
Los veranos son cada vez más calurosos debido al calentamiento global, incluso en Alemania. El aire acondicionado aún no está muy extendido en Alemania, sobre todo en las casas particulares. Así que el lema es: ¡a sudar! ¿Verdad? En Internet circulan algunos trucos más o menos útiles para refrescarse con las altas temperaturas. Entre otras cosas, hemos leído que una toalla mojada delante del ventilador puede tener un efecto refrescante. Hemos probado el "truco anti-calor" y hemos medido si realmente refresca. Al final del artículo encontrarás más consejos para combatir el calor.
Montaje experimental
Medimos la temperatura en una habitación de 24 m² en un día especialmente caluroso (33 °C de temperatura exterior). Ventilamos previamente la habitación durante 10 minutos para que la calidad del aire fuera buena. La temperatura de la habitación era de 27,25 °C después de la ventilación. A continuación, cerramos las ventanas y colocamos un simple ventilador de pie en la habitación. Mojamos una toalla con agua helada y la sujetamos al ventilador.
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La prueba del ventilador
Pusimos el ventilador al máximo y lo dejamos girar. La prueba duró unos 90 minutos sin ninguna persona en la habitación. El diagrama muestra que la temperatura no descendió significativamente. Las fluctuaciones fueron tan pequeñas que la temperatura se mantuvo en torno a los 27 grados durante toda la prueba.
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Otros valores, sin embargo, cambiaron en el rango visible y tangible. Por ejemplo, la humedad, que incluso superó el valor límite del 60%, como puede verse aquí:
Los COV también aumentaron, lo que sin duda se debe a las fragancias del detergente de la toalla recién lavada y no es perjudicial.
Conclusión sobre el truco anti-calor:
Aunque la temperatura general de la habitación no ha descendido, hemos notado que el flujo de aire directo del ventilador es significativamente más fresco. Debido a la refrigeración por evaporación, se puede sentir una brisa fresca en las inmediaciones del ventilador, pero esto no cambia la temperatura ambiente. Por lo tanto, seguimos recomendando este consejo, por ejemplo, en el escritorio o junto a la cama por la noche, ya que el frescor directo es muy agradable.
Hemos recopilado algunos trucos más contra el calor para que los pongas a prueba:
1. toalla mojada, o pelo mojado
Para poder dormir bien por la noche incluso con calor, necesitas refrescarte. Puedes hacerlo con la ayuda de una toalla húmeda o una franela, por ejemplo, que puedes utilizar para refrescarte o taparte una y otra vez. Acostarse con el pelo mojado también ayuda. Estos consejos son aún más eficaces si se combinan con un ventilador. Atención: las toallas o el pelo excesivamente mojados y goteando dejan manchas de agua que pueden provocar la aparición de moho en la ropa de cama y el colchón.
2. desconectar los aparatos de la red eléctrica
Los ordenadores, portátiles, televisores y otros aparatos producen calor continuamente, incluso en modo de espera. Por eso conviene desconectarlos completamente de la red eléctrica cuando no se utilicen. En los días calurosos, absténgase de cargar aparatos en casa; es mejor hacerlo por la noche.
4. elegir la ropa adecuada
En los días calurosos, lleve ropa holgada y aireada, confeccionada con tejidos naturales como el algodón o el lino. La ropa de colores oscuros absorbe y retiene el calor del sol, por lo que la ropa de colores claros es la mejor opción. La ropa ajustada y sintética puede provocar una acumulación de calor.
5. muñecas frescas
Deje correr agua fría sobre la zona en la que normalmente se toma el pulso en la muñeca o utilice un cojín refrigerante. Esto proporciona un efecto refrescante intermedio. Si no tienes a mano un cojín refrigerante, también puedes utilizar productos del congelador.
6. ¡no te duches con agua fría!
Las duchas heladas estimulan bruscamente la circulación y aumentan la tensión arterial. También hace que los vasos sanguíneos se contraigan rápidamente para retener el calor en el cuerpo. Esto provoca un aumento de la sudoración tras el enfriamiento. Por lo tanto, es mejor ducharse con agua tibia. Después de ducharse, deje que la piel se seque al aire libre, ya que la evaporación del agua tiene un efecto refrescante adicional.
7. utilizar correctamente el frigorífico y el congelador
Los frigoríficos y congeladores desprenden calor, sobre todo cuando se abren. Por eso, piensa siempre de antemano lo que quieres sacar y vuelve a cerrar las puertas rápidamente. Pon los aparatos sólo tan fríos como sea necesario, de lo contrario producirán aún más calor. La temperatura ideal es de 7 °C para el frigorífico y de -18 °C para el congelador.
8. nada de bebidas heladas
Aunque en verano te apetezcan bebidas gaseosas heladas, lo mejor es que bebas té o agua templados y te asegures de ingerir suficientes líquidos. Las bebidas demasiado frías tienen que ser calentadas por el cuerpo. Esto requiere mucha energía y te calienta aún más.
9. probar recetas ligeras de verano
Los platos ligeros y ricos en agua sobrecargan menos el organismo y refrescan. Frutas como la sandía o la piña son ideales como tentempié entre comidas. Las ensaladas ricas en minerales también son una buena opción. Evite los platos picantes, ya que pueden aumentar la sudoración. Coma las comidas difíciles de digerir más tarde por la noche, cuando se haya enfriado.
Así que aquí tienes un montón de consejos y trucos para refrescarte con el calor. Esperamos que pases el verano sintiéndote fresco.
